El otro día me enteré de que han cortado la carballeira que hay bajando hacia Sanfiz. Fui hasta allí y pude ver como en cinco minutos habían arrasado con lo que había tardado cientos de años en formarse. Ese es un espacio que conozco desde pequeño, en el que he jugado y disfrutado.
Mi vida es relativamente muy corta. Por lo tanto es lógico que les doliera más a personas que llevan ahí viviendo toda su vida. Pues no. Allí estaban un montón de vecinos cuando comenzaron las obras, con cara de jubilo, supongo que pensando que cuanto antes empiecen a construir , lo que ahora es un atajo de silvas y carballos pronto se convertirá en más dinerito para ellos.
¿Y que va a hacer con el millón de dolares, señor Burns? No se... Echarlo al montón, supongo.
A ver si fan un edificio de centosesenta plantas, se lles inclina como a torre pisa e entón votan en falta unha árbore para apoiarse e non escarallarse contra o chán, oh.
Ah, y por supuesto, para poder construir allí tambien tienen que echar de su casa a mis abuelos, donde llevan viviendo toda la vida y que han levantado despues de trabajar durante muchos años. Algunos parecen no entender que el valor sentimental y la calidad de vida que allí tienen no se la pueden pagar con dinero. Y ni con dinero, por que lo que les han dado por ella ni siquiera es lo que debería.
Así que gracias por todo y no se olviden reir.
Tripa rota